Síntoma 10 de la Mujer que Ama Demasiado
“En una relación, está mucho más en contacto con su sueño de cómo podría ser que con la realidad de la situación ”
«Otro perro con el mismo collar”
Hola compañeras, voy a contaros un poquito…
A los 7 días de conocer al que fue mi pareja durante 13 años, ya me hizo la primera jugarreta… pero estaba tan ansiosa de cariño que en vez de decirle, ¡¡Adios!! ¡¡Hasta nunca!! decidí convertir a esa persona en mi príncipe azul, porque en el fondo y a pesar de todo… era una buena persona y tenía muy buen corazón, y yo creí ciegamente que valía la pena luchar por él.
En esta relación deje toda mi juventud, mi energía y mi salud.
Y viéndolo ahora desde otra perspectiva sé que en el fondo no me gustaba, ya que cuando estábamos con amigos me avergonzaban sus comentarios, su incultura, pero supongo que valía más eso que estar sola. Por aquellos tiempos no quería estar sola, andaba demasiado perdida y al desconocer el amor me dejé llevar hacia un mundo irreal en el que soñaba, soñaba y soñaba mientras el día a día era otra cosa…
Yo no aceptaba su enfermedad, creía que era vicio y por eso no entendía cómo no podía esforzarse por hacerme feliz con todo lo que yo hacía y sacrificaba por él.
Y así pasaron muchos años, con idas y venidas hasta que entendí que estaba enfermo y necesita ayuda.
Busqué la ayuda y seguí soñando cómo serían las cosas al recuperarnos pero lo que pasó es que tal recuperación nunca llegó. No le dejé tocar fondo, siempre lo rescataba… por eso nunca tuvo la necesidad de pedir ayuda por sí mismo.
Lo que hice fue buscar ayuda para mí y de esa manera y con mucho esfuerzo pude al fin desprenderme de él y dar la bienvenida a otro al que empecé a justificar por los problemas que tenía y le impedían quererme como yo me merezco.
Volvió a empezar la historia con otro perro pero con el mismo collar…
Una mujer que ama demasiado
Ibiza, Diciembre 2009